Manolo y Venancio platican en
Manolo y Venancio platican en el bar:
Anoche tuve un sueño erótico.
¿Ah, sí? ¿Y qué pasaba?
Mira, había una rubia impresionante, no te la puedes ni imaginar, y va y me dice: Dame tus cuarenta centímetros de polla y haz que me duela.
¡Jo! ¿Y tú qué hiciste?
Lo que pude… La follé tres veces y luego le pegué de hostias.