Un mexicano se cas y
Un mexicano se casó y lo primero que quería en su vida era tener un vástago. Pues bien, el hombre intentó en todas las posturas posibles embarazar a su esposa. Pasaron uno, dos, tres meses y la mujer, nada, así que el tipo le dice:
Pos mira, mujer, ya que no podemos tener hijos hasta ahora, creo que sería conveniente ir a la ciudad pa que nos vea un médico.
Y así, partieron los dos. Después de hacerse todos los exámenes de rigor, el mexicano y su esposa se regresaron a su pueblo con la promesa de que les enviarían los resultados de los análisis lo antes posible.
A la semana siguiente llegan los análisis donde el mexicano ve el resultado:
S.S.P.M
Al ver tan buena dicha, el tipo corre con su mujer:
Pos mira, mija, el resultado fue muy bueno, aquí dice S.S.P.M., es decir: Sano, Sanito, Puro Machote. Así que véngase pa acá mijita.
Y así siguieron con su búsqueda. Pero pasaron seis meses, ocho meses, un año y la mujer, nada. Disgustadísimo, el mexicano fue a saldar cuentas con el médico de la ciudad, ingresando con pistola en mano al tiempo que reclama:
Usted, medicucho de porras, me envió mis análisis hace un año diciéndome que estaba yo bien y hasta ahora mijita no puede darme un macho…
Perdone, ¿podría mostrarme sus análisis?, le contesta el médico.
Pos acá los traigo, aquí dice S.S.P.M, o sea, Sano, Sanito, Puro Machote y mire, hasta ahora nada.
Pues disculpe, allí no dice: Sano, Sanito, Puro Machote. Allí dice: SÓLO SIRVE PARA MEAR.